domingo, 8 de noviembre de 2015

¡HAY PODER EN LA SANGRE DE JESÚS!


Precioso Testimonio del poder y autoridad de Dios sobre toda enfermedad o circunstancia.

"Les contaré una experiencia con un hermano de la Patagonia chilena, quién se tuvo que ir a operar a una ciudad llamada Valdivia, algo salió mal y cayó en coma, estuvo como 14 días en coma. Yo viajé a esa cuidad a orar por él, ya que vivo en Temuco, fui a acompañar a su hija, que lo asistía. Pude entrar a verlo en la UTI (Unidad de cuidados intensivos)...
...comencé a orar dejándome guiar por el Espíritu Santo. 
Rodeé la cama cortando ligaduras de muerte, luego oré por él, lo ungí con aceite y declaré vida a su espíritu.
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 Las enfermeras del otro lado me miraban extrañadas, pero yo sabía que tenía esa única posibilidad para peleárselo al enemigo. 

Salí enseguida, ya quedaban pocos minutos para terminar el horario de visita. Luego entró su hija por los minutos que quedaban y cuando nos juntamos fuera, salió sonriendo y me dijo: “Mi papito va a salir de esta, porque cuando entré, ¡Me asusté tanto porque se dobló, casi se sentó y volvió a caer inerte! ¡Y le volvió el color a su cara!”. Le digo: “¡Gloria a Dios! ¡Volvió vida a su espíritu!”Y así casi a la semana lo dieron de alta. 


Yo volví a viajar a esa ciudad para verlo. Y cuando me ve me abraza y comienza a llorar, y me dice: 
"Estaba en la orilla del infierno, con una cadena a uno de mis pies, desnudo y un demonio me pinchaba con una especie de varilla y yo lloraba y pensaba: ¿Porqué mis hermanos no me vienen a buscar?

Tenía mucha sed y miedo, ¡estaba aterrorizado! porque no veía escapatoria.

Yo veía cómo pasaban miles a cada momento a las profundidades. 

Veía vecinos, amigos y el demonio me decía: "No saldrás de aquí, porque eres homicida"
"Cualquiera que aborrece a su hermano, es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en sí."
1 Juan 3:15 
¡Pero en un momento, veo que se abren las cadenas y escapo!"
  El Señor le dio tiempo para que arregle su vida y a los seis meses se fue con una sonrisa mi amado hermano Raúl. 


Amados debemos llenarnos de Su presencia y pedir mucho discernimiento. Nuestro Amado Jesús dijo: 
“...Mayores cosas harán en mi Nombre, porque Yo voy al Padre”. 
Sólo hay que alinearse en todo con Él y creer." 
¡HAY PODER EN EL NOMBRE DE JESÚS!
 (Testimonio de sanidad por la sierva de Dios Verónica D., de Chile)

¡Dios les bendiga con el poder de su Espíritu!